La propuesta proyectada plantea una distribución de edificios paralela a la Vía Ibérica de forma que se mantienen la direccionalidad de la parcela y la del edificio Torreón. También se mantienen los dos accesos existentes en la parcela, pero acentuando la importancia del acceso peatonal desde Vía Ibérica, manteniéndose el acceso rodado desde la c| Argualas como ordena el PGOU. Otro condicionante importante que se ha querido tener en cuenta es el desnivel de la parcela, aprovechando las diferentes cotas existentes: por un lado la cota actual del edificio Torreón y por otro la de los dos accesos desde la calle, situados 3,20 m por debajo de aquel. De acuerdo con esto se proyectan distintos niveles en el interior de la parcela para que todos los edificios y espacios proyectados sean perfectamente accesibles.
El último criterio mantenido en la distribución proyectada ha sido el de la posibilidad de la ejecución por fases independientes de todos los edificios y de su urbanización adyacente. Por ello se ha considerado como mejor opción la de situar edificios aislados y paralelos a la vía, de forma que su construcción afecte lo menos posible a los demás, siendo válida la propuesta tanto para el total como la realización parcial sin afectar la funcionalidad ni la representatividad del conjunto.
La distribución general se plantea de la siguiente manera:
Se mantienen los edificios actuales del Torreón y de Oficinas. A partir del Edificio Torreón y como continuación de este se proyecta un nuevo Edificio de Oficinas 1 en el que se ubicaran los espacios trasladados del edificio de la calle San Miguel a excepción del centro de control que ocupara un edificio exento. Ambos edificios, oficinas 1 y centro de control se disponen paralelamente a vía Ibérica creando una nueva fachada y se sitúan a la cota del nivel de calle, es decir 3,90 m inferior a la actual cota de acceso del edificio Torreón. Precisamente aprovechando el desnivel existente y vaciando interiormente el Torreón, se consigue una entrada a este desde el nivel de calle y a su vez se plantea la conexión interior de ambos edificios.
Esta conexión interior se realiza siempre a través del Espacio Endesa que se convierte en un espacio público de especial relevancia. Se proyecta la rehabilitación del edificio Torreón, pues su valor arquitectónico así lo justifica, reutilizándose para espacios de uso más público, como pueden ser el salón de actos, aulas, zonas de reuniones, cafetería, y que pueden servir tanto para los propios empleados de la empresa como para el público que pueda ocasionalmente utilizar las dependencias.
También se mantiene el actual edificio de Oficinas, de manera que durante la construcción del resto de edificios conserve el mismo número de empleados sin necesidad de reubicaciones temporales. Es precisamente este edificio el que marca la línea de actuación de la primera fase, de manera que los espacios situados entre la parte posterior de aquel y el medianil posterior paralelo a vía Ibérica será objeto de una segunda fase de actuación. En esta segunda fase se proyecta un nuevo edificio de oficinas en el que se realojarían los empleados ubicados en el edificio de Aznar Molina, y las naves de almacenamiento que fueran necesarias. Dichas naves tendrán en cubierta un tratamiento verde, de manera que se revitalizará la calidad ambiental del conjunto y se evitará su imagen industrial.
Los nuevos edificios de oficinas se dotarán de una planta de garaje, de manera que queden dotados con unas 150 plazas de aparcamiento. Además se dejan previstos sendos espacios para aparcamiento en superficie para visitas ocasionales y otro para recarga de vehículos eléctricos, cuya utilización en un futuro próximo va a ir en aumento. También en la parte posterior del solar se proyecta un espacio libre para la creación de un bosque solar, de manera que la imagen de la empresa proyecte hacia el exterior la idea de ahorro energético.
Zaragoza, 2011
Carlos Bressel, Santiago Carroquino, Marta Quintilla
Endesa
20.201,39 m² (superficie de urbanización 24.757,95 m²)